Juan Carlos "Mono" Fontana




Juan Carlos “Mono” Fontana nació el 8 de noviembre de 1959 en la misma casa de Villa Devoto en la que aún vive.

Tenía apenas 3 años, cuando un tamborcito que le regaló su tía comenzaba a atrapar su interés que mas tarde se convertiría en afición por la batería. que ejecuta en forma autodidacta, hasta que a los 8 años comienza sus estudios formales.

Con tan solo diez años, comienza su carrera como músico profesional. Y ya desde los doce forma Madre Atómica con Lito Epumer y luego Pedro Aznar, mítica banda under de fines de los sesenta, en cuyo repertorio incluía música de su autoría.. En el camino había reemplazado la batería por el piano, que aprendió a ejecutar acompañándose de un teclado dibujado sobre cartulina con los nombres de cada nota. Es en esta época que desarrolló su capacidad como polinstrumentista, tocando, además de su principal instrumento, percusión, vibráfono y guitarra.

En 1977, se incorpora a Los desconocidos de siempre, inicialmente como baterista y luego como pianista.

En 1978 en un reducto de San Telmo – “Jazz y Pop” - se enfrentó cara a cara con las ecuaciones armónicas del jazz, ya no moderno, sino contemporáneo. Poco tiempo después, durante un workshop en el Teatro San Martín, recibiría la aprobación de Herbie Hancock.

En 1983, su incontenible deseo de crecer como músico lo impulsa a aceptar las reiteradas invitaciones de Luis Alberto Spinetta y unirse a su banda, con la que llega a grabar 6 discos (Madre en años luz, Privé, Exactas, Téster de violencia, Don Lucero y Pelusón of milk). Paralelamente rearma su grupo Madre Atómica, con una nueva formación (Lito Epumer, Guillermo Vadalá, Jota Morelli y el mismo). En 1986, grava el disco Madre Atómica.

En 1988, realiza varias presentaciones como tecladista de Dino Saluzzi.

En 1989, es convocado por el ciclo “Solo Piano”compartiendo escenario con grandes músicos.(Ziegler, Estrella, Salgán).

En 1990 realiza presentaciones en dúo con el talentoso músico Horacio Larumbe.
En 1992 abre con su “Solo Set” para el concierto Lyle Mays y Robben Ford en el teatro Ópera de Buenos Aires.

En 1993 forma parte del Proyecto Musiquarium (Escuela) y comparte escenario con Joe Zawinul y Trick Gurtu. En ese año el bajista americano Alphonso Jonson (Eeather Report) realiza una serie de clínicas y conciertos, con Mono Fontana como tecladista.

Combinó desde el inicio de su carrera actuaciones y grabaciones con importantes músicos locales (Nebbia, Paez, Giecco, Lebón, Aznar,etc.) y realiza sesiones informales con músicos que han visitado nuestro país, como Wyton y Bradford Marsalis, George Gruntz, Tom Bretclein, Dave Gotblat,etc.

En 1994 continuó presentándose en distintas salas y clubes de Buenos Aires.

En 1995 comienza a preparar lo que sería su primer trabajo solista, a la vez que realiza presentaciones con los músicos que hoy forman su trío (Santiago Vazquez y Martín Iannaccone).

En 1997 participa del unplugged de MTV (EEUU) de Luis Alberto Spinetta el cual presentó su disco “Estrelicia” en el Teatro Gran Rex de Buenos Aires.

En 1999 clausura, junto a Spinetta y Claudio Cardone el ciclo Buenos Aires Jazz, organizado por la Dirección de Música de la Ciudad de Buenos Aires, el que conto con otros dos encuentros no menos excepcionales: Dino Saluzzi-Luis Salinas, y Gerardo Gandini-Manolo JuárezLito Vitale.

De 1998 es su primer trabajo solista “Ciruelo” en el que contó con la participación del talentoso músico Santiago Vázquez en percusión. Dice de este trabajo, que “está totalmente “craneado”…todo está pensado, pero tuvo mucho tiempo de maduración”.

En el 2006 presenta su segundo Cd “Cribas” ,una obra totalmente instrumental, plena de ruidos urbanos, imágenes, climas, secuencias raras y el sintetizados con sonido de piano pelado, que recorre las dieciocho piezas.


Mono Fontana define su música como al arte de pintar con sonidos y contar historias.“El texto que acompaña este trabajo es la manera más fiel que define mi sentir.

Es difícil calcular en cuántas grabaciones ha participado, ni de cuántos músicos ha sido sideman. Hay que buscar mucho para encontrar un músico de rock argentino que no haya estado alguna vez en contacto musical con él.

“No puedo estar en un solo lugar, soy como Zelig, innovar es la tradición.”Soy mas bien una degeneración Me fascinan los Beatles, los Carpenters, Bernard Herrmann, el tipo que escribía la música de las películas de Hitchcock. Soy un poco como la tapa de Sgt. Pepper's”.dice en un reportaje.

“Me gusta que se escuche mi música como si se estuviera viendo una especie de película.“Yo hago música para película. Pero la película no está”.

La pasión por musicalizar películas data de su juventud cuando por las noches le ponía música a películas de Sandrini, Clase Z o Series, bajando el volumen y tocando encima. Esta afición se proyectó en el tiempo y no solo explica en parte Cribas, sino también sus apariciones junto a Fernando Kabusacki musicalizando Cine Expresionista Alemán en el MALBA (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires)

Otro elemento clave de su música son los sonidos urbanos: autos que pasan, peleas de vecinos, risas de bebes, ladridos o trenes. Los coleccionaba desde niño en diferentes formatos y hoy ostenta un banco de ruidos urbanos enorme “Lo que hago es exponerlos cuando toco, improviso con ellos todo el tiempo, los uso como disparadores, como los actores que actúan sin guión”

Y para finalizar una frase propia que lo define como artista y como persona:

“Hago música porque quiero, no porque tengo que hacerla, no tengo ninguna presión de nada…es una carrera solista sin presiones. Creo que lo que hice siempre fue desde el lugar más honesto”.

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